Ramon Díaz Eterovic es un escritor chileno (Punta Arenas 1956) perteneciente a la generación literaria del 90, además es un máximo exponente de la novela neo policial criolla. Díaz Eterovic se ha hecho santiaguino desde 1974, es el creador del detective privado Heredia, un personaje protagonista de más de 20 títulos de novelas negras, una verdadera saga herediana, ambientadas en un Santiago urbano y muy céntrico; ha sido traducido en más de 20 países. Dice el escritor de su héroe…es un antihéroe descreído, un ser marginal con ética y valor para mirar la realidad sin concesiones…Heredia es el testigo de la Historia chilena de los últimos 25-30 años post-golpe de Estado.
Una parte de la obra del autor fue adaptada para la TV chilena en 2005 bajo el título de Heredia & Asociados; se pueden ver algunos capítulos en Youtube, pero es una adaptación libre de los libros. Se mira con interés por el ambiente tan chileno-capitalino aunque va demasiado rápido, prefiero los libros.
Díaz Eterovic ha sido galardonado con numerosos premios y hasta tres veces con el Premio Municipal de Santiago género novela (1996, 2002 y 2007) y con el Premio del Consejo Nacional del Libro y de la Lectura (1995, 2008 y 2011).
El escritor utiliza la novela policial para hablar de temas sensibles en la sociedad chilena, como los detenidos desaparecidos, el narcotráfico, el tráfico de armas, la carencia de una real democracia, las traiciones de todo tipo, la ecología, las desigualdades sociales, etc. Díaz Eterovic quiere escribir una comedia humana y chilena con temas e historias que reflejen diferentes aspectos actuales de la sociedad. Se dice que Díaz Eterovic es un habitué del bar La Piojera de la calle Aillavillú, cerca de la estación Mapocho donde se sitúa el antro del detective Heredia, en pleno barrio « bravo » de Santiago que fue otrora el alero de la bohemia literaria de los años 20-30.
El autor ha sido objeto de estudios y publicaciones por el catedrático chileno Guillermo García-Corales, quien escribió « las novelas de Díaz Eterovic son novelas de consciencia y estética urbana y representan la mejor expresión del relato detectivesco en el Chile de la nueva narrativa de los años 90″. (cf « Poder y crimen en la narrativa chilena contemporánea: las novelas de Heredia » y « Ramón Díaz Eterovic, reflexiones sobre la narrativa chilena de los años 90″).
Y José Promis, en un trabajo universitario destaca que en la literatura neo policial latinoamericana, Diaz Eterovic tiene un discurso narrativo diferente característico de una cultura hispanoamericana, es más testimonial sobre lo que ha sucedido en un Santiago urbano durante la historia reciente, con el propósito de denunciar. En las novelas con Heredia el lector observa la transformación del delito privado en un crimen social en la medida que es ejecutado a menudo por aparatos o agentes del Estado y cuyas consecuencias afectan a toda la sociedad. La atmósfera de degradación moral en que se debate Heredia no desaparece con la solución del crimen porque los temas explotados son crimen-poder-política; el enigma es secundario y lo realmente importante es el entorno social.
Es éste mi ultimo volumen con las aventuras del nostálgico y vapuleado Heredia; que yo sepa, no hay otro volumen publicado por ahora. Este detective privado es un arquetipo del género porque reúne todas las características más clásicas del detective de novela negra : soledad, escepticismo, rabia justiciera, marginalidad, alcoholismo y consumo de tabaco excesivo. La nota original la aporta una prosa poética urbana, el amor de Heredia por su gato Simenon y mucho humor socarrón que salva una prosa por momentos de una gran tristeza.
La cola del diablo (2018) retoma hechos que figuraron en Nunca enamores a un forastero (2003) cuando Heredia se rindió a Punta Arenas para resolver un caso peliagudo y conoció a la tórrida Yazna con quien vivió un romance, pero que nunca volvió a ver en más de 20 años.
Esta vez Yazna lo ubicará para resolver el caso de la desaparición de una chica, Marta, que fue la novia (polola, dicen en Chile) de su hijo Goran. Siguiendo una pesquisa bastante difícil, Heredia llegará hasta el arzobispo de Punta Arenas y cada paso se hará más siniestro.
En tela de fondo tendremos los sempiternos ex militares y ex carabineros derivados de la época de la dictadura; esta vez para estar a la moda o estar de consenso general, tendremos la implicación de la iglesia católica en tópicos que resuenan de por el ancho mundo.
Heredia una vez más arriesga su escuálido pellejo y sale adelante con sus dotes deductivas y su arrojo. También asistiremos a un amago de segundo romance con Yazna, pero mucha agua ha pasado bajo el puente y no surge la chispa de antaño. Por otro lado Heredia tendrá una sorpresa de talla, pero optará por volver a su cuchitril de la calle Aillavillú y a su gato Simenon.
Me da la impresión que el gato y Heredia estrenan novedades en sus vidas y que podría ser un final abierto con nuevas aventuras.
Otros libros del autor : La ciudad está triste, Solo en la oscuridad, Ángeles y solitarios, Nunca enamores a un forastero, Los 7 hijos de Simenon, El ojo del alma, Nadie sabe más que los muertos, El color de la piel, A la sombra del dinero, Muchos gatos para un solo crimen, La oscura memoria de las armas, El segundo deseo, La muerte juega a ganador, El leve aliento de la verdad, La música de la soledad, El hombre que pregunta.
LA COLA DEL DIABLO, LOM Ediciones 2018, ISBN 978-956-00-1122-0