A flor de piel de Javier Moro

Afficher l'image d'origineJavier Moro es un escritor español (Madrid 1955)  de madre francesa (Lapierre) y es un sobrino carnal del conocidísimo Dominique Lapierre. Cursó estudios de Historia y de Antropología en Paris entre 1973-78.

A flor de piel (2015) es otro buen libro, muy bien documentado (cuatro años de trabajo) y que nos revela unos personajes españoles increíbles de valentía temeraria además que poco conocidos o caídos en el olvido. Se trata de los doctores Francisco Xavier Balmis y de su ayudante Josep Salvany, acompañados por Isabel Zendal y 22 huérfanos que realizaron lo que se conoce como La Real Expedición Filantrópica de la Vacuna. La historia de esta expedición se la contó a Javier Moro la responsable de comunicación del Jardín Botánico de Madrid donde hay una biblioteca que resguarda la documentación de las expediciones científicas españolas.

La portada del libro lleva una hermosa flor negra que simboliza la variola puesto que se le conocía también como la « peste negra » o « la flor negra » (enfermedad viral) que devastó el mundo con una mortalidad que llegó hasta un 30% de los contaminados.

Edward Jenner desarrolló en Inglaterra una vacuna hacia el año 1796 partiendo du pus originado por la infección du virus de la variola bovina. Esta inoculación voluntaria la llamó vacuna porque provenía de una vaca. Y el término quedó para siempre.

La aventura humana narrada por Javier Moro es impresionante e involucró sólo a españoles además de ser muy poco conocida: se trató de llevar una vacuna « viva » a los territorios de Ultramar a comienzos del siglo XIX, con un Imperio español en plena decadencia durante el reinado de Carlos IV y su ministro Godoy en guerra contra la Francia napoleónica. Hay que rendir homenaje a este rey español que creyó y apoyó con dinero este magno proyecto por el bien de toda la humanidad.

Los personajes de la novela son tres, todos reales.

La heroína femenina es Isabel Zendal, nacida en Galicia en el seno de una familia paupérrima, como tantas otras familias campesinas. Existe una gran discrepancia en cuanto al nombre exacto de esta heroína excepcional que se conoce también bajo otros 35 nombres ! (Cendala, de Cendala, Sendales, Cendales, Gandalla, etc).

Tras la muerte de su madre, Isabel debió tomar las riendas de su pobre choza para sacar adelante a sus hermanos y ayudar a su padre con las rudas labores del campo. El milagro de Isabel fue de ser alfabetizada por el párroco de su pueblo, durante sesiones de los sábados cuando Isabel disponía de algunas horas. Inteligente en demasía debió ser esta niña, porque de saber leer le permitió de entrar como criada en una casa burguesa como niñera, rol que Isabel  conocía a la perfección. Se sabe que Isabel Zendal fue seducida y luego abandonada por un militar que la dejó embarazada. Una madre soltera en aquella época era una lacra muy mal vista por la sociedad, pero Isabel pudo tener a su hijo y guardarlo con ella gracias a la magnanimidad de sus patrones. Y de criada pasó a ser la encargada de la Casa de Expósitos de La Coruña donde se desempeñó de manera brillante cruzando en su camino el doctor Balmis que la quiso llevar como encargada de los niños portadores de la vacuna durante la expedición.

Casa de Expósitos de La Coruña

Otro personaje y el principal es el médico militar alicantino Francisco Xavier Balmis, un héroe de la Medicina, pero un verdadero sociópata, incapaz de relacionarse socialmente. A este médico intrépido y avanzado se le debe también la curación de enfermedades venéreas. Fue él quien organizó esta expedición filantrópica que se conoce como « la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna » o también como la « Expedición Balmis ».

El tercer personaje es también un médico militar, Josep Salvany, el ayudante de Balmis con una personalidad completamente diferente, empático y sentimental. Desgraciadamente el hombre ya estaba enfermo antes de la expedición, probablemente de tuberculosis, y si se embarcó en el proyecto fue con la esperanza de que climas mejores le aportaran una mejoría de salud y también llevado por un alto sentido humanitario.

La expedición partió del puerto de La Coruña en 1803 en la fragata María Pita con nuestros tres personajes principales y 22 huérfanos o niños expósitos a cargo de Isabel, utilizados como verdaderas cajas de Petri para llevar el virus vivo en el brazo de los niños con la técnica llamada de brazo a brazo. Un viaje largo, interminable y sembrado de aventuras y desventuras a lo largo de América del Norte, América Central y América del Sur y hasta Filipinas. Durante la travesía los dos médicos se disputarán la atención de la abnegada Isabel que tendrá una clara preferencia por el enfermizo, pero tierno Salvany. Los personajes conocerán mucha oposición, especialmente de parte de los virreyes corruptos y del clero, la mayoría de la gente se oponía a la vacuna por ignorancia y por miedo.

La expedición finalizará en 1814 después que Salvany y Balmis se separaron y que este último fallecerá en Bolivia en 1810 después de padecimientos terribles. Esta hazaña humana increíble logrará vacunar a unas 500 000 personas y salvar así miles de vidas humanas.

Isaben Zendal terminará su vida en Puebla, México, donde una Facultad de Medicina lleva su nombre. Se considera que Isabel Zendal fue la primera enfermera de la humanidad.

Un buen libro que se lee con interés porque está escrito de manera amena, clara como un buen libro de aventuras. Qué agallas tenía esta gente de bien !

Otros libros reseñados : El Imperio eres tú, Mi pecado.

A FLOR DE PIEL, Seix Barral 2015,  ISBN 978-84-322-2494-2

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