Los amantes de Granada de Laurence Vidal

Laurence Vidal (auteur de Les amants de Grenade) - Babelio

Laurence Vidal es una periodista y escritora franco-canadiense (Paris 1960).

Los amantes de Granada (1999) relata la vida novelada de Isabel de Solis, una noble granadina que fue raptada en una razzia de los musulmanes en 1471 y llevada como esclava a la Alhambra donde vivió una historia de amor con Muley Hacén, emir de la Alhambra y mayor de 17 años.

LOS HECHOS HISTÓRICOS: Isabel de Solís (1454-1510) fue la hija de noble estirpe de don Sancho Jiménez de Solís, alcaide de Bedmar y comendador de Martos, asesinado en una razzia de los nazaríes en 1471. La doncella Isabel de 17 años fue llevada a la Alhambra como esclava cristiana e internada en el gineceo junto con otras 60 mujeres. El emir de Granada, el Muley Hacén de los cristianos, se prendó de su belleza espectacular de colorina y la hizo su preferida, casándose con ella hacia 1474, con Isabel convertida al islam.

Tras la muerte del emir, Doña Isabel volvió al cristianismo así como los hijos del matrimonio que fueron bautizados e incorporados a la corte de los reyes católicos.

Isabel de Solís se conoce también como Zoraida, Soraya o La Cautiva de la Alhambra. El único vestigio de su pasaje por el palacio de La Alhambra es una de las torres conocida como la « Torre de la Cautiva ».

LA NOVELA.

La novela está muy bien escrita y el idioma original es el francés, probablemente muy bien traducida porque el lenguaje es rico, barroco, ampuloso para describirnos los fastos de La Alhambra de la época con sus jardines lujuriantes, llenos de sol, colores y olores.

La vida de la esclava cristiana está muy bien relatada para contarnos los hábitos de palacio, las costumbres locales, la vida al interior del gineceo, el tipo de contacto entre la gente, la decoración de los aposentos, los hábitos vestimentarios, etc.

Pero lo más interesante es seguir a doña Isabel en su romance con el hombre más poderoso de La Alhambra y el papel, cada vez más importante que la esclava cristiana jugó en la vida del emir. La vida del sultán transcurría entre las incursiones en territorio cristiano donde se saqueaba, violaba, quemaba, robaba y se hacían de esclavos/as. El resto del tiempo se dedicaba a la caza y a sus palacios. El gineceo del emir descrito en la novela comprendía unas 60 mujeres con sus hijos. Pero el emir tenía una esposa legítima, Aixa, muy temida (tercer matrimonio para ella), déspota e implacable que se decía descendiente del profeta. De la esposa legítima, el sultán tenía 3 hijos de los cuales Boabdil era el heredero.

Las mujeres del harem le proporcionaban solaz a su antojo y se decían felices cuando el soberano las escogía para la noche. Vivían en la espera de una selección, acicalándose y perfumándose a destajo; las rivalidades eran frecuentes y las grescas con la sultana también.

En este contexto ingresa al harem la bella y delicada cristiana que además era una colorina espléndida de ojos color azul de mar. Pero la muchacha era muy diferente, primero, porque era instruida, sabía leer y escribir lo que no era corriente en aquellos tiempos ni lugares. Luego, tenía un carácter de los mil demonios y era insumisa. En el libro no se hace mención, pero leí en alguna parte que don Sancho, su padre la había enviado a un convento para sosegarla y enseñarle la obediencia.

Es evidente que una personalidad así asombró y luego deslumbró al recio emir, lo que no era del todo evidente porque las féminas de aquella época no tenían derecho a nada.

Poco a poco entre estos dos seres fue naciendo un amor intenso y profundo que dejó huella en la historia. Isabel-Soraya supo conquistar al moro y hacerse respetar por él. En el libro le habría dado tres vástagos (2 hombres y una niña) y sólo dos en los datos históricos que pude consultar.

En pocos años la situación de predominio nazarí se degradó, y con el poder adquirido por los reinos de Isabel de Castilla y de Fernando de Aragón unidos, El Andalous fue perdiendo prestigio y tierras. Al mismo tiempo complotaba la sultana con los abencerrajes (familia musulmana oriunda de Granada) y hasta el propio hijo del emir, Boabdil, traicionó a su padre, respaldado por la sultana.

La pareja de Zoraida y Muley Hacén se quiso hasta el final y terminó con la muerte del emir por enfermedad (epilepsia). El abdicó en favor de un hermano, pero fue su hijo Boabdil quien entregó en 1492 las llaves del reino a los reyes católicos.

Existe sobre el mismo tema, pero más enfocado en Boabdil el maravilloso libro de Antonio Gala El Manuscrito carmesí (1990), premio Planeta del mismo año. En ese libro leí la famosa frase que dejó para la posteridad la sultana Aixa cuando se dirige a su hijo Boabdil y le dice « No llores como una mujer lo que pudiste defender como un hombre ».

image
La Torre de la Cautiva

LOS AMANTES DE GRANADA, Pocket Edhasa 2006 (LV 1999), ISBN 84-358-1742-7

Laisser un commentaire